lunes, 8 de octubre de 2007

II Aparecium Festival (Málaga 2007)


Bueno, pues lo cierto es que podrían escribirse y contarse muchas cosas acerca de esta segunda edición del Aparecium Festival en Málaga. El problema es que, dado que no he podido ir haciendo una crónica diaria, ahora me veo obligado a exprimir mis recuerdos para concentrarlos en un sólo texto en el que recoger todas las experiencias vividas. Así que lo haré según me vaya apeteciendo, directamente.
Bueno, el abajo firmante llegó el martes día 2 de octubre a primerísima hora, y allí conocí a Paco, a quien voy a recordar como otra gran persona para siempre, y que inmediatamente me llevó a su tienda de magia y después a desayunar (gracias Paco, me gustó eso de los molletes malagueños, jeje). Durante ese desayuno me reencontré con amigos que había conocido en la edición anterior (diciembre de 2006), como Javier, David, Juan, Fran y Luigi (Ludus)... Lo cierto es que fue un día de relax, y la cosa empezó a ponerse interesante cuando llegó David Williamson por la noche, el cual es un tipo fantástico que merece la pena conocer, porque tiene un sentido del humor increíble.
Adoré reencontrarme también con Isaac, de Barcelona... qué tipo tan genial, creo que me pasé todo el festival diciéndole: "¡Quillo, hazme un juego, que llevas to'l festival aquí y no me has hecho nada!". Y el cabrón siempre me hacía uno para deleitarme. ¡Qué grandes risas me he echado contigo, Isaac!...
Varias cosas han caracterizado este II Aparecium Festival. Una de ellas ha sido sin duda la diversión, el humor y las risas, procedentes de todos los países representados. Gracias a Christian Engblom he aprendido un poquito más de mi bagaje multicultural, y ahora tengo más ganas aún, si cabe, de aumentarlo. David Williamson no se ha quedado corto, ni mucho menos, sino que ha inundado Málaga con su maravillosa forma de ser y su humor histérico. Quiso llevarse grandes recuerdos del viaje y nos dejó también unos cuantos. Además conocí a Katja, la simpática esposa de Christian Engblom, con quien cada vez disfruto y aprendo más. La verdad es que pasé grandes momentos con Gea, con Bea, con Fernando (gracias a los tres, ya sabéis por qué), con Andrés (tú nunca sobras, amigo mío), con Juanjo (qué bien te has portado conmigo, niño) con Fran y Luigi (por cierto, chicos, enorme espectáculo infantil el vuestro, me lo pasé como todos los enanos que había allí) y por supuesto, con Robert Jägerhorn, de quien ya conocía su calidad humana, pero esta vez me marcó aún mucho más. En tan sólo un par de días me ha mostrado su humildad, su cariño y su educación. Es otra de esas personas que guardas en un rinconcito muy preciado. Ah, y un juego realmente precioso... Desde aquí, gracias también a ti, Robert.
He seguido aprendiendo más inglés, claro, gracias al trabajo de traducir conferencias, actuaciones y conversaciones de sobremesa. He aprendido que no siempre las cosas son lo que parecen y que cuando alguien te da todo lo que tiene se está entregando a sí mismo.
Ha sido todo muy especial. No es un gran resumen pero me cuesta meterlo todo en unas pocas líneas. Solamente quiero terminar de agradecer a todas las personas que han compartido conmigo estos días, sin excepción, porque he sacado grandísimas cosas muy muy buenas. En especial, quiero expresar desde aquí mi agradecimiento y mi admiración a Miguel y a María, quienes me han tratado como a un verdadero amigo ofreciéndome todo lo que tenían, me han abierto las puertas de su casa y me han demostrado que la hospitalidad no tiene límites. De verdad, gracias a los dos, porque sois absolutamente maravillosos, os lo digo de corazón.
Dani, sólo quedas tú. Sin ti esto no habría sido posible, y ya sabes lo que pienso de ti. Gracias, compi, porque eres más que único.
P.D.- Y aumentando mi colección de fotos y Ases...


1 comentario:

Anónimo dijo...

Jejeje amigo Rober, aquí si alguien tiene que dar las gracias soy yo, no porque me lo haya pasado genial con vosotros, como siempre, no porque tus traducciones hayan sido mi salvación y la de muchos, no por tus chistes malos... tengo que darte las gracias ... por tus botas... jajaja

Siempre es guapo cuando uno se entera de que los rockeros de Madrid vienen a casa, sois dos tios, Greca y Tú que siempre nos habéis tratado como amigos, incluso cuando apenas nos conocíamos, muchas gracia spor tus palabras.

Espero que nos veamos en la próxima, y que sea pronto...

Saludus. Luigi